“No había forma de hacer una denuncia, no había evidencia más que la palabra de una persona contra la otra”, afirmó la exconvencional.
La exconvencional, Teresa Marinovic, lanzó una bomba. Ella acusó a la Universidad San Sebastián, que se encuentra en el centro de la polémica por el sueldo que le entregaba a Marcela Cubillos, de ofrecer dinero a sus excompañeros de la Convención Constituyente para hacer campaña por el Rechazo.
A través de un video que subió a su cuenta de Youtube, Marinovic realizó esta acusación debido al escándalo que rodea a dicha casa de estudios y el sueldo de la exministra de Educación. Ella partió calificando la situación como “extremadamente grave”, y que podría tener consecuencias electorales para la derecha, especialmente “si es que se insiste en la estrategia de defender lo indefendible”.
Ella aseguró que en caso de Cubillos hay un financiamiento político camuflado, y entregó sus razones para creer esto. “Les pido atención a lo que voy a contar, porque es una denuncia grave. No tengo pruebas, no hay nada escrito, ni audio. Es sólo el testimonio de una persona que me merece confianza. Cada uno de ustedes decidirá si es digno de crédito lo que voy a decir”, anunció.
Ella recordó el tiempo en el que trabajó en la Convención Constituyente, en donde uno de sus colegas le contó que recibió una inusual oferta. “Siendo yo todavía convencional, una persona convencional también, pero no militante UDI, me comentó que la habían incluido en una lista, una nómina de personas a las que se les pagaría por hacer campaña para el plebiscito de salida”, declaró.
“A esta persona se le ofreció un contrato con la Universidad San Sebastián de alrededor de $2.500.00 pesos al mes. Lo mismo que ganábamos como convencionales, que se le pagaría entre los meses de julio, una vez terminada la convención, y diciembre de ese año”, aseguró.
“Lo primero, que le pareció extraño a este convencional, fue que la oferta se hiciera a partir de un contrato con la universidad, contra la obligación de hacer campaña, pero incluyendo meses posteriores al plebiscito. Pensó, suponiendo que la desfachatez no era tanta, que quizá el ofrecimiento era adelantarle la plata, correspondiente a un semestre, para que el semestre siguiente pagara esa deuda con clases. Pero no”, continuó.
“Le dijeron que no era necesario porque se buscaba garantizar tranquilidad a los exconvencionales para hacer campaña sin preocupaciones económicas. Como es obvio, la persona en cuestión se negó, pero no había forma de hacer una denuncia, no había evidencia más que la palabra de una persona contra la otra”, afirmó Marinovic.
Sin embargo, Teresa aclaró que no le consta que algunos convencionales de la UDI o afines a dicho partido, hayan aceptado esta propuesta, pero aseguró que la persona que le contó esto dice la verdad.
“Cuando digo caja pagadora de la UDI no lo digo en base de especulaciones o teorías conspirativas, sino de antecedentes como éste y varios más, menos escandalosos, pero bastante elocuentes”, cerró Teresa Marinovic.